Cuando se siembra el maiz en España

El maíz es, por consiguiente, un cultivo esencial para la economía de este país por su valor en el total de cereales y su peso en la producción agrícola final. Es, indudablemente, una materia prima indispensable para las compañías agroalimentarias, tanto si se ocupan de la nutrición animal como a la humana.

Merced al maíz se crea un enorme volumen de negocio en compañías de servicios de semillas, fertilizantes, fitosanitarios, material de riego, maquinaria, secaderos, entre otros muchos. Asimismo fomenta la economía de las áreas despobladas y el lugar de población en ese ambiente.

¿Cuándo se cosecha el maíz en España?

Comunmente la cosecha de maíz para consumo se efectúa entre agosto y septiembre. Para juntar las mazorcas para la molienda, en cambio, se estima que las plantas se sequen, con lo que la cosecha es desde finales de septiembre y a lo largo de todo el mes de octubre.

Maíz (ensilaje): siembra (sept.-oct.) y cosecha (feb.-mar.).

Peso de 1000 granos de maíz

El peso de 1000 granos (PMG) de maíz se usa para detallar con precisión el nivel de madurez. El valor promedio está en un rango, entre 298-282 gramos de peso por cada mil granos.

Características del maíz para el pelo

Las proteínas que tiene dentro el maíz son escenciales para sostener el pelo en buen estado y que no se caiga con sencillez. Para usarlo como mascarilla capilar, tenemos la posibilidad de usarlo con apariencia de pasta, con la que tenemos la posibilidad de contemplar todo el pelo. Deja accionar unos minutos y lava con agua no muy caliente.

La proteína de maíz asimismo es muy ventajosa para la piel. Para utilizarlo como mascarilla facial, tenemos la posibilidad de entremezclarlo con un huevo y aplicarlo sobre la piel del rostro. Deja accionar unos minutos y lava con agua no muy caliente.

Los productores de maíz saben por experiencia, y la literatura científica lo asegura, que la fecha de siembra del maíz puede perjudicar su desarrollo y producción. No obstante, frecuentemente es imposible seleccionar la fecha de siembra, puesto que está cierta por el tiempo (temperatura y precipitaciones) del año, lo que puede complicar el ingreso a las parcelas y asimismo perjudica la temperatura del suelo y esto también perjudica la germinación de las semillas, que precisa un mínimo de unos 10ºC. Por consiguiente, el instante de la siembra puede cambiar de un año a otro. Este producto exhibe los desenlaces productivos y factores fisiológicos y de cultivo en tres datas de siembra distintas.

Desde el criterio fisiológico, los mayores desempeños de maíz se dan en el momento en que la planta explota al límite su periodo de desarrollo y también intercepta la mayor cantidad viable de radiación del sol (que no equivale a elevadas temperaturas) tras la floración, esto es , a lo largo del llenado de grano. De esta forma, por estas causas técnicas citadas, por un viable ahorro de agua y por un viable mejor precio del grano en cosechas mucho más tempranas, desde hace unos años ciertas compañías semilleras y productoras de maíz se sugieren cultivar antes de lo común.

Generalmente, en las ubicaciones de regadío de Lleida y Huesca, el 16% de los productores de maíz siembran antes del 15 de marzo, el 44% entre el 15 y el 30 de marzo, y el 33% entre el 1 de marzo y el 15 de abril (Sisquella et al. ., 2004). Sin embargo, hay que tener en consideración que la fecha de plantación de cada región tiende a estar relacionada, aparte de la climatología, al género de riego y sus turnos, todos ellos componentes que tienen la posibilidad de perjudicar a la temporada de plantación.

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